Rafael Amaya regresa a sus inicios y canta ska con su antigua banda ‘Almalafa’
Rafael Amaya, reconocido por su icónica interpretación como Aurelio Casillas en “El señor de los cielos”, ha dado un giro sorprendente en su carrera al regresar a una de sus pasiones más arraigadas: la música. El actor mexicano, quien recientemente se despidió del papel que lo catapultó a la fama internacional, ha retomado sus raíces musicales con un proyecto fresco y emocionante.
Desde que concluyó su participación en la exitosa serie de Telemundo, Amaya no se ha mantenido alejado del ojo público. Recientemente, ha sorprendido a sus seguidores con el lanzamiento de un video musical donde se le puede ver cantando y bailando al ritmo del ska, género que siempre ha ocupado un lugar especial en su corazón. En este proyecto, colabora con la banda mexicana Almalafa, mostrando una faceta distinta y muy personal de su talento.
El retorno de Rafael Amaya a la música no es del todo inesperado para quienes conocen su trayectoria. Antes de su consolidación como actor, el talentoso artista formó parte de la reconocida banda de ska mexicano Garibaldi durante tres años. Este nuevo proyecto musical, que lleva por título “Matar”, ha sido bien recibido por los cibernautas y admiradores del actor, quienes celebran verlo explorar nuevamente sus habilidades musicales.
En una reciente entrevista con “El Gordo y la Flaca”, Amaya compartió la emoción que lo motivó a embarcarse en este nuevo capítulo musical. Expresó que el proyecto está impregnado de nostalgia y significado personal, rescatando una canción que tiene un poderoso mensaje detrás. Esta incursión no solo representa un retorno a sus raíces, sino también una oportunidad para conectar con su audiencia de una manera más íntima y auténtica.
Además de su colaboración en el género ska, Rafael Amaya ha explorado otros horizontes musicales con igual entusiasmo y dedicación. Recientemente, el actor anunció su incursión en el mundo de los corridos tumbados, un estilo musical muy popular en la escena contemporánea. Su participación en una colaboración con la agrupación Código FN y Tito Doble P ha generado expectativas entre sus seguidores, quienes han elogiado la composición y la interpretación del actor.
Este nuevo proyecto no es la primera incursión de Amaya en el ámbito musical. A principios de su carrera, específicamente en 1997, el actor llegó a la Ciudad de México con el sueño de triunfar en la música. En aquel entonces, formaba parte de la banda “Almalafa”, donde comenzó a cultivar su amor por el ska y el rock. Esta faceta menos conocida del actor resalta su versatilidad y pasión por las artes, revelando una trayectoria multifacética que va más allá de la actuación.
Su regreso a la música, tanto en el ska como en los corridos tumbados, demuestra su versatilidad y determinación por seguir innovando y conectando con su público de maneras únicas y emocionantes. Con cada paso, el actor mexicano reafirma su lugar no solo como una figura icónica de la pantalla, sino también como un artista completo y apasionado.
Con información de HERALDO DE MÉXICO.